La diástasis abdominal es un problema que afecta a todas las mujeres tras dar a luz y consiste en la separación de los rectos causado por una disfunción del tejido conectivo del abdomen.
Después del parto, todo debe volver a recolocarse en su sitio para volver a funcionar de forma correcta. La zona del abdomen es la que siempre queda más debilitada, justo en la línea del alba, en donde solo hay una capa de tejido. Es una parte muy débil del cuerpo porque en ella no hay músculo.
Es muy complicado o diría casi imposible,conseguir que se quede con el aspecto anterior, pero si se puede mejorar si se sigue un buen tratamiento.
Se recomienda hacer ejercicios supervisados por un fisioterapia.
No solo es un defecto estético, mostrando un vientre flácido y que aumenta tu figura, causa un problema también de incontinencia, dolor en la pelvis, de espalda, problemas digestivos y una deficiente estabilidad.
Es el fisioterapeuta el encargado de diagnosticar y crear el tratamiento personal e individualizado para la diástasis abdominal.
Si sospechas que puedes padecerlo, puedes hacerte un test en casa para confirmar las sospechas.
Échate en una superficie no muy blanda boca arriba. Doblamos las rodillas con los pies apoyados cerca de los glúteos. Ponemos las manos palpando en el abdomen, justo en el ombligo. Debes hacer una abdominal y con los dedos debemos palpar los abdominales. Cuando notamos que hay más de dos dedos de separación entre los rectos abdominales, es muy posible que tus sospechas sean ciertas.
Para fortalecer y cuidar nuestro abdomen, tenemos que trabajar el músculo abdominal transverso, que es otro de los músculos de nuestra pared abdominal y que siguen la dirección de un cinturón. Ejercitándolo, reduciremos centímetros de nuestra cintura y protege nuestra espalda y abdomen.
Ejercitar este músculo también te ayudará a prevenir la incontinencia y los prolapsos, ya que actúa sinérgicamente con nuestro suelo pélvico.
Para corregir esta deficiencia, deben trabajarse estos músculos de una forma adecuada para que consigan una consistencia y fuerza adecuada para mantener el volumen intraabdominal.
La finalidad de los ejercicios de fisioterapia en el tratamiento de esta deformidad conocida como diástasis, es conseguir que el abdomen defectuoso y dañado, recupere su funcionalidad y conseguir un abdomen competente haciendo que trabaje toda la musculatura y junte de nuevo los músculos rectos.
Estos ejercicios son exclusivos para el abdomen y se complementan usando una faja que los ayudará en su recuperación.
Si se hacen de la forma correcta, los resultados serán visibles al cabo de unas tres semanas, en la mayoría de los casos.
Si aún habiendo seguido un tratamiento asesorado por un fisioterapeuta especializado en este campo, no es efectivo por la gravedad de los daños, con una gran separación de los rectos abdominales y posibles hernias que no desaparecen, u otros problemas derivados, quedaría la opción de la operación cirugía.
Para plantear una cirugía debe cumplirse los siguientes parámetros:
La separación debe ser superior a 3 centímetros o de 2,5 centímetros y sintomáticos, siempre que se haya terminado sin éxito el tratamiento con el fisioterapeuta y ya habiendo pasado un mínimo de 6 meses desde el parto o cesárea.